Martha Peña Preciado
Médica general y Neuróloga - U. Nacional de Colombia
Contacto: mpena@ioir.org.co tel 57601- 3534016
El 29 de noviembre también celebraría el prestigioso cazador de vampiros, porqué?
Un 29 de noviembre de 1825 nació nuestro profesor referencial, Jean-Martin
Charcot en París. La fecha de quienes nacen para hacer historia parece ser un hito
jubiloso que obliga al encuentro, un motivo para escribir. Pues bien, Charcot fue
también profesor de Van Helsing, médico de la trascendente ficción de Bram Stoker,
Drácula.
"Soy un estudioso del cerebro", explica Van Helsing a su colega psiquiatra el doctor
Seward al llegar a la mitad de la historia cuando su paciente Lucy acababa de morir.
Van Helsing se refiere a Charcot cuando dice que "estaba dentro del alma misma
del paciente que él trataba" y con esta estrategia el escrutador de vampiros
pretende entrar en el alma misma de su paciente.
La neurología exige que se analice a cada enfermo de forma individual e integral
para entender su contexto cultural, su red social y afectiva, la interpretación que
hace de sí mismo y su enfermedad, la susceptibilidad genética y las probables
bases moleculares de la disfunción de su sistema nervioso. Es por eso que el
profesional en neurología tiende a ser meticuloso, a detenerse en el detalle.
Solo existe una forma de ser buen neurólogo: que la neurología le apasione.
Hasta la mitad del siglo XX la neurología y la neurocirugía compartían camino, por
eso no es de extrañar que Van Helsing hacia el final de Drácula describiera a
Renfield, personaje oscuro, como secundario a un trauma craneoencefálico. En
Renfield, personaje oscuro, se afectaba progresivamente el área motora frontal
haciéndose apremiante una craneotomía. Se le hizo la craneotomía, Renfield mejora
brevemente y muere.
Encontrar en la ficción parte de nuestra historia y de nuestro hacer diario es
fascinante, en el fondo, porque podríamos ser ficciones dentro de ficciones, libros
dentro de libros, Quijotes hablando de Cervantes.
Van Helsing era un apasionado de encontrar el problema y probables formas de
resolverlo. Trabajó con sus amigos y pareciera haber tenido un margen de éxito
terapéutico muy a pesar del conde. Porque la única forma de hacer buena
neurología es hacerla con la dosis suficiente de apasionamiento.
¡¡¡Buen día neurólogos !!!
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